La kakistocracia es un concepto que describe un gobierno dominado por los peores individuos, aquellos menos capacitados o con las peores intenciones. Es un tipo de gobierno en donde prolifera la corrupción, la ineptitud y el populismo en la política.
Definición y Origen
Kakistocracia, un término proveniente del griego antiguo (κάκιστος, kákistos, "el peor" y κράτος, kratos, "gobierno"), designa un sistema político donde el poder recae en los individuos menos aptos, menos calificados o con las peores intenciones. Es un antónimo de meritocracia, donde el poder se otorga en función del mérito o la capacidad.
Si bien el concepto es relativamente reciente en el lenguaje político, la idea de un gobierno corrupto o inepto es tan antigua como la propia política. Historiadores y filósofos han advertido repetidamente sobre los peligros de la demagogia y la corrupción en el poder.
Desde hace décadas, España es uno de los mejores ejemplos de kakistocracia, en donde cada presidente es peor que el anterior. Hemos llegado con Pedro Sánchez al final del pozo, donde, aun rodeado de 90 asesores, los peores elegibles, ha llevado a España a considerarse como un Estado fallido. Esto no pasa de un día para otro; la herencia recibida también fue mala, pero en apenas unos pocos años este presidente ha llevado a la casi descomposición de lo que una vez fue España. Solo hay que ver cómo se ha gestionado el DANA en Valencia: peor imposible. Ha fallado todo lo falible a la hora de predecirlo. Esto es algo que se hubiese perdonado si el Estado hubiera gestionado con celeridad y competencia desde el minuto cero, pero no. Nos encontramos con los kakistos, los peores, que lo único que saben es buscar rédito político a todo. Y aquí esto es lo que han priorizado por encima de las vidas humanas. Con la esperanza de capitalizar para sí mismo esta desgracia, Pedro Sánchez ha detenido toda ayuda estatal, al ejército incluido, para ver cómo el gobierno valenciano, otra kakistocracia, se hundía en su ineptitud. Y Pedrito solo atinó a decir que 'si necesitan ayuda que la pidan', mientras pensaba: 'Os jodéis, valencianos, por no haberme votado'. Es más, viendo que el pueblo reaccionó heroicamente, demostrando una vez más que el pueblo español no conoce fronteras autonómicas, ha ido a ayudar dando donaciones y personándose para ayudar a quien lo necesitara. Gracias al pueblo se ha podido ayudar a la gente necesitada que, una semana después de ver sus vidas arruinadas, no han llegado a ver a nadie mandado por el gobierno, sintiéndose abandonados por un Estado fallido que solo sirve para expoliarnos con los impuestos. El gobierno, intentando tapar sus vergüenzas, ha mandado a la policía para intentar impedir el paso a la gente que quería ayudar y multarlos en un gesto casi kafkiano.
Sin duda, esta actuación demuestra que esta kakistocracia que nos gobierna nos ha llevado a un estado fallido donde viven de saquearnos a las órdenes de la OTAN y la UE, siguiendo la Agenda 2030. Cuando los ciudadanos necesitamos la ayuda del Estado, esta no aparece. Y si aparece, es para intentar detener que el pueblo se organice y se ayude entre sí, y mandar inspectores de trabajo para multar a las empresas arrasadas por la DANA por no abrir o si su local, lleno de barro, le falta alguna normativa. Estamos dirigidos por una auténtica kakistocracia y, mientras siga siendo así, esto solo irá a peor. Por ejemplo, muchas organizaciones han reunido muchas donaciones para dar comida y ropa a los necesitados. Pues bien, cuando entren las CBDCs, olvídate, ya que detendrán todas estas transferencias. Y si detectan a gente ayudando, le bloquearán todas las cuentas, como pasó en Canadá. Cuando todos los coches sean eléctricos, no podrán ir allí, ya que tienen un sistema de control para que se pueda detener de forma remota e impedir que llegue la ayuda.
Con el sistema de control de medios, bloquearán las redes sociales y no se conocerá lo que pasa realmente, solo lo que te digan TVE y la Sexta. Solo habrá una narrativa, la del gobierno dictatorial que le seguirá echando la culpa al calentamiento global, como están haciendo en Valencia para evadir responsabilidades de un acontecimiento que se sabe que se repite periódicamente cada varias décadas y que se tiene documentado desde el siglo XIV. Pero claro, ahí tenéis a la izquierda progre, la kakistocracia en su máximo esplendor, que hay que notar que no han hecho nada para ayudar en Valencia y que, desde su bar tomando su calimocho, te echa la culpa por usar coches y comer carne, y afirma desde su superioridad moral que hay que seguir destruyendo presas, fomentar más lo woke y subir los impuestos para solucionar el mundo.
Solo espero que todo esto desemboque en que la gente abra los ojos ante esta kakistocracia que nos gobierna y que este sentimiento visto en miles de videos estos días lleve a que los culpables no salgan indemnes y se exijan responsabilidades por las víctimas humanas que se podrían haber salvado y los destrozos en los pueblos, ya se ha visto cómo Pedro Sánchez tuvo que salir huyendo de Valencia para presentarse como una víctima de la ultraderecha, todo el que ayuda es de ultraderecha cuando esto no va de nada de esto, esto va de gente que quiere ayudar independientemente de la ideología y el color de la piel, de gente que viendo la inoperancia de este estado fallido se levanta del sofá y va a ayudar, no se pide carne para ayudar solo ganas y ánimo, esto quedará reflejado para la historia de cómo el pueblo salva al pueblo, y que aunque viene de muy atrás ya queda patente cómo estamos gobernados por una kakistocracia que poco o nada le importa el pueblo, solo para saquearlo, que entre ineptitud e incompetencia gestiona la ruina de España en favor de las grandes multinacionales. Espero que en unos meses esto no se olvide tapado con el siguiente caso de corrupción o pandemia, que se grave a fuego todo lo que ha estado pasando y que en las próximas elecciones se tenga bien presente si queremos que nos sigan gobernando los kakistos, los peores.
Características de la Kakistocracia
Desprecio por el conocimiento: Los líderes kakistocráticos suelen menospreciar a los expertos y a la intelectualidad, promoviendo la ignorancia y el pensamiento simplista.
Polarización exacerbada: La sociedad se divide en grupos cada vez más polarizados, lo que dificulta el diálogo y la búsqueda de soluciones consensuadas.
Ineptitud: Los gobernantes carecen de las habilidades y conocimientos necesarios para gobernar eficazmente.
Corrupción: El poder se utiliza para beneficio personal o de un grupo privilegiado, en detrimento del bien común.
Populismo: Se apela a las emociones y prejuicios de las masas en lugar de ofrecer soluciones racionales a los problemas.
Culto a la personalidad exacerbado: El líder kakistocrático se presenta como una figura mesiánica, casi divina, y se rodea de un culto a la personalidad que tolera pocas críticas.
Debilitamiento del estado de derecho: Las leyes se aplican de manera arbitraria, favoreciendo a los aliados del régimen y perjudicando a los opositores.
Control de los medios de comunicación: Los medios de comunicación son manipulados para difundir propaganda y censurar las voces disidentes.
Nepotismo y clientelismo: El poder se concentra en un círculo cercano de familiares y amigos del líder, quienes obtienen beneficios económicos y políticos a cambio de lealtad.
Miedo y represión: Se utiliza el miedo y la represión para mantener el control social y silenciar a los opositores.
Promesas incumplidas: Los líderes kakistocráticos suelen hacer promesas grandilocuentes que nunca cumplen, generando frustración y desilusión en la población.
Destrucción del tejido social: La kakistocracia erosiona los lazos sociales, fomenta la desconfianza y debilita la cohesión social.
Dinámica y Evolución de una Kakistocracia
Una kakistocracia no surge de la noche a la mañana, sino que es el resultado de un proceso gradual de deterioro institucional y social. Inicialmente, puede presentarse como una solución a problemas reales, pero con el tiempo se transforma en un sistema perverso que beneficia a unos pocos en detrimento de la mayoría.
Es importante destacar que la kakistocracia no es un estado estático, sino que evoluciona y se adapta a las circunstancias. Los líderes kakistocráticos suelen ser hábiles manipuladores y pueden cambiar sus discursos y estrategias para mantenerse en el poder.
Causas Sociales y Psicológicas
Desilusión y Cinismo: Cuando la población pierde la fe en las instituciones y en los políticos, se vuelve más susceptible a líderes carismáticos que prometen cambios radicales, aunque sean poco realistas o incluso dañinos.
Polarización Social: Una sociedad altamente polarizada dificulta el diálogo y el consenso, lo que facilita la manipulación de las masas y la emergencia de líderes que explotan las divisiones existentes.
Populismo y Demagogia: Los líderes populistas apelan a las emociones y los prejuicios de las masas, simplificando los problemas y ofreciendo soluciones fáciles pero superficiales.
Falta de Educación Cívica: Una población poco informada y con una baja educación cívica es más vulnerable a la manipulación y a la propaganda.
Causas Políticas y Económicas
Crisis Económicas Profundas: En momentos de crisis, la población busca soluciones rápidas y sencillas, lo que puede llevar a elegir líderes que prometen milagros económicos, aunque sus propuestas sean inviables o perjudiciales a largo plazo.
Debilidad Institucional: Cuando las instituciones democráticas son débiles o corruptas, es más fácil para los líderes autoritarios tomar el poder y establecer un régimen kakistocrático.
Corrupción Sistémica: La corrupción generalizada socava la confianza en el gobierno y fomenta la impunidad, lo que crea un ambiente propicio para la emergencia de líderes corruptos y sin escrúpulos.
Interferencias Extranjeras: En algunos casos, potencias extranjeras pueden intervenir en los asuntos internos de un país para desestabilizarlo y favorecer el surgimiento de un gobierno más dócil a sus intereses.
Manipulación de la información: Los medios de comunicación y las redes sociales pueden ser utilizados para difundir propaganda y desinformación, lo que puede influir en la opinión pública
Consecuencias a Largo Plazo
Estancamiento y retroceso: La ineptitud y la corrupción sistémica impiden el desarrollo económico y social. Los recursos se malgastan en proyectos inútiles o se desvían hacia bolsillos particulares, dejando a la población sin servicios básicos y oportunidades.
Destrucción del tejido social: La polarización política, la desigualdad y la injusticia erosionan la confianza entre los ciudadanos y debilitan los lazos comunitarios.
Pérdida de la identidad nacional: La manipulación de la historia, la promoción de un nacionalismo excluyente y el culto a la personalidad pueden llevar a la pérdida de la identidad nacional y a la fragmentación social.
Violencia y conflicto: La falta de legitimidad de los gobiernos kakistocráticos puede generar descontento social y protestas, que a su vez pueden ser reprimidas violentamente, desencadenando ciclos de violencia y conflicto.
Intervención extranjera: La debilidad interna y la inestabilidad política pueden atraer la intervención de potencias extranjeras con intereses propios en la región.